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martes, 16 de agosto de 2011

El hundimiento



Iniciemos los comentarios de esta película, realizada en el 2004, con la imagen real que reproducimos arriba. Imagen bien lejana de lo que se viene a contar en Der Untergang, que es su título original.




DIRECTOR Oliver Hirschbiegel
GUIÓN de Bernd Eichinger basado en la novela de Joaquim Fest.
MÚSICA Stephan Zacharias
FOTOGRAFÍA Rainer Klausmann


REPARTO Bruno Ganz, Alexandra Maria Lara, Corinna Harfouch, Ulrich Matthes, Juliane Köhler, Heino Ferch, Christian Berkel, Matthias Habich, Thomas Kretschmann


PRODUCTORA Constantin Film





PREMIOS


2004: Nominada al Oscar: Mejor película de habla no inglesa
2004: Nominada al Goya: Mejor película europea


SINOPSIS


Berlín, abril de 1945. En las calles de Berlín se libra una encarnizada batalla. Hitler (Bruno Ganz) y sus fieles se han atrincherado en un búnker. Entre ellos se encuentra Traudl Junge (Alexandra Maria Lara), la secretaria personal del Führer. En el exterior, la situación se recrudece. A pesar de que Berlín ya no puede resistir más, Hitler se niega a abandonar la ciudad y, acompañado de Eva Braun (Juliane Köhler), prepara su despedida.


En el hundimiento se nos habla sobre:

- la humanidad de lo deshumanizado (sí señor@s, Hitler era una persona, con todo lo horripilante que ello implica), así como la deshumanización de la humanidad.
- la decadencia y el fracaso de lo insostenible.
- la incapacidad de reconocer los propios errores.
- la irracionalidad humana.
- la desconcienciación de grandes sectores de la juventud y otros colectivos de la sociedad.
- las distintas formas de afrontar un cambio de estas características: luchar por la vida; dejarse morir disfrutando de tus últimos instantes; suicidarse apáticamente; morir matando.
- lo absurdo de sobrevalorar sentimientos como el honor, la patria o el orgullo.
- el sinsentido del comportamiento humano.

Una película brillante que muestra todas estas cosas con sencillez, contundencia y buen oficio.



Dejando a un lado las interpretaciones del filme (que me parecen bastante buenas), y los detalles sobre la grabación (está bien hecha, pero sin llegar a ser nada del otro mundo), centrémonos en el tema del sentimiento de esos alemanes que salen reflejados en la película.

Sinceramente, y con el paso del tiempo, muchos (por no decir todos) nos hemos dado cuenta de la barbarie que cometió el III Reich. Y no me refiero a la II Guerra Mundial (que dejó firmada el Tratado de Versalles en 1918), sino a la teoría racial del nacionalsocialismo de Hitler y las consecuencias que dicha teoría trajo a Europa. Sin embargo, ¿alguna vez nos hemos preguntado qué sintieron aquellos alemanes, nacionalsocialistas hasta la médula, que sí creyeron en Adolf Hitler, que sí creyeron en el III Reich y que sí creyeron en la teoría del "Mein Kampf"?, yo creo que si nos lo hemos preguntado, nunca nos lo pudimos imaginar tal y como lo refleja esta película.

Es una película que hace recapacitar bastante. Los nacionalsocialistas no eran "seres de otro mundo", ni "perturbados mentales", ni tan siquiera "asesinos sanguinarios" (así nos los pintaban hasta ahora, salvo alguna excepción). Los nacionalsocialistas que creyeron en Hitler se contaban por millares, y la mayoría era gente corriente, gente como nosotros....que atraídos por un discurso convincente, y dadas las circunstancias de la época, creyeron en Hitler hasta el final. Es una visión tan real como escalofriante.

Algunas escenas, como la de los niños (y niñas) de las Juventudes Hitlerianas defendiendo Berlín ante el avance del Ejército Rojo, o por ejemplo, la del oficial alemán llorando, reconociendo ante oficiales soviéticos la cabeza (calcinada) de Hitler, nos hacen pensar que esta película es de las más fieles a la verdad que se han hecho sobre la imagen y el entorno de Adolf Hitler.




Lo más destacable de la película, y que sería suficiente para ponerle nota, es la magnífica interpretación que del Führer Hitler hace Bruno Ganz. Soberbio. Autoritario en ocasiones; sobrio y distante hasta con sus más allegados; pero también desquiciado, superado, HUNDIDO.

Es una interpretación insuperable, lo que da más valor al hecho de que los secundarios estén prácticamente a su misma altura.

La historia, está muy bien enfocada, con un guión que evita caer en juicios morales, y presenta la historia (y la Historia también) sin edulcorar. Este punto era crítico en una producción como esta, dada la trascendencia y relevancia histórica de la caída del Tercer Reich, y se ha superado con creces.

El aspecto técnico, impecable. No destaca por sí solo, pero sí da vigor y sobriedad a la cinta. Cumple con creces. La ambientación, exquisita, perfecta.

En resumen, sobresaliente película germana, muy recomendable.

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